Heredó los ojos de fuego de su Padre Celestial,
la mirada compasiva y franca es de su madre;
eso dijo un soldado que estaba al pie de la cruz.
El lóbulo de la oreja es idéntico al de su Papá,
la escucha atenta y presta es la de su mamá;
según un maestresala en unas bodas en Caná.
La figura de su boca es igual a la de quien procede,
su sonrisa, en cambio, es la de ella, al mirarlo a Él;
así lo expresó José al verlos jugar en el patio.
Su porte real e imponente es el de su Padre,
su perfil judío y rasgos son los de su madre;
así lo reconoció su primo al verlo llegar al Jordán.
Tiene la misma genética de amor que Él,
pero, el tipo de sangre AB es el de su progenitora;
esto lo supo Mendel, pero no por sus chicharos.
Su cabello es del mismo tono que el de su madre,
pues, su Padre tiene la cabeza y cabellos blancos;
es lo que escribió Juan en el capítulo uno del Apocalipsis.
Tiene la misma sabiduría y poderío que su Padre,
su actitud es, sin duda, la de la esclava del Señor;
eso oyó Pilato de su esposa, y se lavó las manos.
¡Cómo se parece el Hijo del hombre a su Padre!,
de esto se goza Él cuando lo engendra;
dicho por el Espíritu Santo desde toda la eternidad.
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