Parte 2
Entonces, ¿usted es un hombre religioso?- Pregunto una señora mayor a 50 años no se si era reportera o solo quería saber- Solo precise decir: Pues creo en Dios eso sí, sin dudar porque creo incondicionalmente que si Dios no existiera no podría yo haber vivido tanto, y sé que le debo mucho respeto, también agradezco que hay puesto a la gente precisa para conocer, tanto la que me trato mal como la que me trato súper, la que sigue por ahí conmigo aunque de lejitos como la que aunque no sé dónde andarán confió que me los volveré a encontrar. Si esos son buenos amigos, aquellos con los que vives la vida aunque sea en diferentes lados y quizás en diferentes mundos, aquellos que con si fuera un golpe en la cabeza ven tú rostro sonriendo, que al comer un taco al pastor o de suadero reviven los momentos en los que junto contigo se enfermaron del estómago por comer en cualquier lado, los que al tomar aquellas bebidas espirituosas sueñan las risas compartidas o las lágrimas vistas que en su momento ellos mismos sintieron.
Claro supongo Dios nos dará la oportunidad de vivir esas cosas y por lo menos tengo fe en eso. Recuerdo aquella buena historia en la que aprendiendo a beber termine abrazado de un poste supongo parecerá un cliché pero así fue, un buen amigo me llevo a comer en un puesto callejero, supongo que a esos tacos le daba el sabor el señor que los preparaba, siempre sudando desde las seis de la tarde hasta entrada la madrugada. Supongo que tomar alcohol y comer es lo óptimo pero en ese momento era inexperto, tanto que junto con mi amigo esperamos recargados en un bocho, miramos al cielo- antes se podía ver más estrellas que ahora, ahora solo se ven 2 o 3 y quizás algún satélite parpadeando por ahí- pero con un buen amigo esperando tacos, mirando el cielo, oliendo la carne esperando ser devorada, se siente paz una extraña paz…
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